Flota europea pide hoy a Sinkevicius que suspenda las 87 vedas
El eurocomisario de Pesca recibe en Bruselas a dirigentes del sector en varios países
Doce días después de la entrada en vigor del veto a toda la pesca de fondo en 87 áreas de los cantiles de España, Portugal, Francia e Irlanda, el eurocomisario Virginijus Sinkevicius, titular de Medio Ambiente, Océanos y Pesca, da la cara por primera vez ante representantes de decenas de miles de pescadores y de miles buques de los Veintisiete. Durante una hora está previsto que converse en Bruselas con dirigentes de la flota de varios países, quienes acuden con el mensaje de que la Comisión Europea «debería de suspender inmediatamente la aplicación del reglamento de ejecución y proceder a su urgente revisión», en palabras de Javier Garat, presidente de Europêche (Asociación Nacional de las Organizaciones Nacionales de Empresas Pesqueras de la UE) y secretario general de la patronal española Cepesca.
Pescadores y Comisión comparten la necesidad de proteger los ecosistemas marinos vulnerables para preservar la biodiversidad, pero discrepan sobre el fondo y la forma del cierre de más de 16.400 kilómetros cuadrados de caladeros del Atlántico nororiental, en aguas españolas, portuguesas, francesas e irlandesas. Con la Comisión enrocada pese al clamor del sector y al reproche mayoritario de la Eurocámara, todo apunta a que el conflicto se dirimirá en los tribunales. «Desde Cepesca apoyamos la decisión del Gobierno de España de presentar un recurso de anulación, esperando que se solicite la suspensión cautelar» cuando se formule ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE), añade Garat. Y, en ese sentido, respalda a entidades como la Organización de Productores Pesqueros Puerto de Burela, que ha decidido «hacer valer judicialmente sus derechos» ante el TJUE.
Al encuentro presencial con Sinkevicius también acude Iván López, presidente de la Alianza Europea de Pesca de Fondo (EBFA, por sus siglas en inglés). En el mismo comunicado difundido por Cepesca donde se pronuncia Garat, López recalca que «los pescadores somos los primeros interesados en la protección de los ecosistemas marinos vulnerables, pero consideramos que cualquier medida dirigida a cumplir ese objetivo debe basarse en la mejor información científica disponible y contar igualmente, tal y como exige la Política Pesquera Común (PCC), con un informe de impacto socioeconómico». Abundando en consideraciones, recuerda que el veto «afecta no solo a las embarcaciones que practican el arrastre en profundidades de entre 400 y 800 metros, sino también, y muy especialmente, a artes como el palangre de fondo que en ningún caso tiene un efecto negativo en los fondos marinos».
Desde Cepesca recalca que la flota europea le «volverá a trasladar al comisario su desacuerdo con aspectos tanto técnicos como de procedimiento y legislativos del reglamento de ejecución», los mismos que expuso Luis Planas, ministro español de Agricultura, Pesca y Alimentación cuando intentó convencer a Sinkevicius de que suspendiese el veto. Sindicatos, comunidades autónomas y empresas del sector comparten esos argumentos.
Además de Garat y López, a la cita con el eurocomisario acuden Daniel Voces, director general de Europêche y secretario de EBFA; Esben Sverdrup-Jensen, presidente de Eapo (siglas, en inglés, de la Asociación Europea de Organizaciones de Productores Pesqueros); así como representantes de la flota de Dinamarca, Francia, Holanda, Irlanda y Polonia.