Las Jornadas de Celeiro son un reflejo de nuestro compromiso para salvar la pesca

Entrevista a M. Máximo Díaz, secretario de la Cofradía de Pescadores Santiago Apóstol de Celeiro y organizador de las Jornadas de Pesca de Celeiro

El cónclave pesquero de A Mariña activa la cuenta atrás para una nueva edición, este año marcada por los cierres de áreas de pesca y los desafíos crecientes a los que debe hacer frente el sector. Las XXVI Jornadas de Pesca de Celeiro se celebran del 24 al 26 de noviembre en modalidad presencial y online.

M. Máximo Díaz, secretario de la Cofradía de Pescadores Santiago Apóstol de Celeiro, impulsó en 1995 la puesta en marcha de las Jornadas de Pesca de Celeiro, la cita obligada del calendario pesquero anual que este año alcanza su edición número XXVI abordando toda la actualidad del sector. Bajo la coordinación de Puerto de Celeiro SA y la OPP 77 Puerto de Celeiro y con financiación del FEMP desde 2015, las jornadas de Celeiro fueron pioneras a la hora de reunir al sector, administración, científicos y expertos para analizar con visión crítica y constructiva los retos de la pesca. Hoy, un cuarto de siglo después, la celebración de encuentros y congresos forma parte habitual de la actividad de las OPP.

“Asumo con satisfacción la responsabilidad de coordinar la organización, aunque soy consciente de que un evento de estas características supone una responsabilidad por lo que representa”, explica Máximo Díaz, voz autorizada de las jornadas al estar a los mandos de la organización. Díaz explica a IP las claves del próximo encuentro que convertirá de nuevo A Mariña en el epicentro del debate pesquero del 24 al 26 de noviembre.

¿Cómo definiría la elección de temas e invitados de esta nueva edición?
A la hora de elegir los temas la organización apuesta por la fórmula de siempre: lo que funciona no se cambia. Es evidente que tenemos un estilo y unos automatismos de funcionamiento instaurados. Este no es un foro monográfico al uso, quizás si algo nos caracteriza es nuestra capacidad camaleónica de adaptarnos a la realidad imperante en cada momento. El nuestro no es un congreso rígido, muy al contrario, tiene su propia personalidad y un prestigio consolidado. Nuestro sector está en constante movimiento, siempre inmerso en mil y una batallas. Las jornadas nacieron hace veinticinco años con el claro mensaje de ser un “foro creado por y para el pescador”, algo que a día de hoy sigue intacto como seña de identidad.

Estamos ante un momento muy complejo para el sector: cierres al palangre de fondo, combustibles, inestabilidad en el mercado… ¿de qué manera se refleja esto en el programa?
Esta situación se ha definido acertadamente como un “tsunami”. Parece que es nuestro signo el tener que navegar contra corriente, luchando constantemente contra la adversidad. Evidentemente, en el programa, y ante el contexto global del congreso, reflejamos nuestro compromiso para salvar la pesca con base en la conservación sostenible de los océanos en sus tres dimensiones económica, social y medioambiental. Somos los primeros interesados, queremos que nos dejen pescar y evolucionar de forma sostenible y resiliente. Luchamos por salvar la pesca.

“Este simposio fue ideado como una herramienta de trabajo y conseguimos alcanzar una madurez suficiente para consolidarnos en el escaparate nacional e internacional como un foro de prestigio”.

Las jornadas cumplen 26 años plenamente consolidadas. ¿En qué momento se encuentran, y hacia dónde se dirigen?
Estamos en la mayoría de edad del encuentro. Este simposio fue ideado como una herramienta de trabajo y conseguimos alcanzar una madurez suficiente para consolidarnos en el escaparate nacional e internacional como un foro de prestigio. Cada nueva edición nuestra meta pasa por igualar o superar el nivel de la última. Las jornadas existen y son posible gracias al sector; gracias a todas aquellas personas que, año tras año, acuden fielmente a esta cita; y, por supuesto, sin duda alguna la calidad de los especialistas que acuden a impartir charlas. No me olvido de mis compañeros de equipo y profesión que son fundamentales.

En los últimos años todas las OPPs se han sumado a organizar sus propios foros, ¿qué diferencia a Celeiro?
Considero positivo que se organicen foros y eventos a través de OPP, cofradías y/o cualquier otra organización sectorial representativa; ello creo que es señal inequívoca de que somos un sector implicado y con inquietudes. Somos una actividad primaria constantemente inmersa en problemáticas que sumergen al colectivo en un mar de dudas e incertidumbres. Humildemente, no es algo que me corresponda a mí decir qué nos diferencia. En todo caso habría que preguntárselo a la gente que acude anualmente y a los ponentes que participan. Quizás el plus de nuestras jornadas está en la excelente acogida que tiene entre el público y el cartel de prestigio de especialistas de los programas. Es evidente que el cónclave se ha labrado un nombre y un prestigio a través de su trayectoria temporal.

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